Charo García Barrigón gestiona una ganadería de 350 ovejas de raza autóctona castellana blanca y negra, siendo esta última una raza en peligro de extinción. Todas bajo un manejo de pastoreo en extensivo, a lo largo de una zona de pasto de 250 hectáreas de roble y retama.
Charo practica el redileo en zonas de matorral para ir esculpiendo un paisaje cada vez más hacia un pastizal y practica un pastoreo dirigido de forma que las ovejas pastan un mínimo de 8 horas diarias durante todo el año, aumentando las horas de pasto en primavera, verano y otoño, y acortándolo en invierno debido a las horas de luz. Sólo se estabulan en época de paridera y en momentos de nevadas.
Todas las noches duermen en una nave para prevenir los ataques de lobo, aunque también cuentan con la protección de varios perros mastines.
La alimentación de las ovejas se suplementa en el caso de las ovejas paridas y en invierno, empleando para ello hierba que compra a un proveedor local a menos de 50 km de la explotación, o paja, procedente de Zamora, a unos 150km de distancia.
Los corderos se comercializan directamente para cordero lechal.
Charo García Barrigón forma parte de Ganaderas en Red y la Cooperativa Cobadú.